martes, 19 de junio de 2012

Caminabas bien despacio




Caminabas bien despacio
con las migas en las manos
que lentamente esparcías,
los pájaros que venían
esas migas se comían
y se marchaban volando.
Cómo te recuerdo padre
cuando se acercan los pájaros,
esos gorriones que juegan
y me recuerdan canciones
que tarareaban tus labios.
Te fuiste sin despedirte,
es algo que no me extraña,
pero me duele en la entraña
que se apagara tu voz.
Aún te llevo muy dentro,
allí donde vive Dios.





4 comentarios:

Anónimo dijo...

Y nunca le olvidaras, cada detalle te recondara a esa persona que dejo su huella en ti.
Grato leerte querido amigo, bendiciones y un abrazo desde la distancia.
alec

Carlos Elpoetaartesano dijo...

Así es querida amiga, siempre se lleva dentro y hay muchos detalles que te lo pueden traer a la memoria,sobre todo si es relativamente reciente.Un abrazo desde la distancia Agua Mar y todas las bendiciones siempre

Edmée Cobo Giancáspero dijo...

Mi querido poeta

Que bello poema a tu padre, duele la partida y mucho, me identifico con tus letras, un padre se lleva muy dentro

Un abrazo, un beso

Carlos Elpoetaartesano dijo...

Así es Edmée, la partida duele pero el amor se queda, y eso no muere.
Tus visitas me han animado siempre, y te lo agradezco. Un abrazo amiga