¡Oye tú!, sirenita,
que navegas
todos los mares, dime,
desembucha,
cuando tu voz despliegas,
cuando a las olas gritas,
cuando tu canto gime,
¿quién te escucha?
¡Oye tú!, sirenita,
¿quién te manda barquitos de papel?,
donde escribe mensajes de colores
que buscan tus amores
y caricias de miel,
y besos de agua y sal
de tus sedientos labios de coral.
Dime, niña bonita,
si me llamas,
si es que me piensas cuando estás solita;
dime si se te erizan las escamas
cuando me ves a mí.
Niña bonita, di.
No hay comentarios:
Publicar un comentario